Otra fecha inolvidable y ya van 4... si hace un año alguien me hubiera dicho que esto iba pasar, le habría tachado de loco. Hoy 2 de febrero he compartido con casi 400 personas, entre las que había unos 130 niños maravillosos, la dicha de poder cantar CARMINA BURANA, con el auditorio rebosante de púbico.
Nuevamente parte de la familia y amigos, me han acompañado y han podido compartir conmigo esta tarde-noche gloriosa.
En la página creada por la Orquesta y el Coro Filarmonía para este evento decían: "SIN LA MÚSICA NO SE PUEDE VIVIR" y realmente tienen razón. Yo me he hecho adicta a ella, y cada día conozco a mas gente que lo es.
Como ya es costumbre, os dejo con una de las piezas de esta obra maravillosa, que aunque no es la nuestra, puede valer.